La pequeña Lucía

El otro día mi hijo me contó que su teacher se ha ido a un sitio a tener una niña muy especial, pero que no es suya... (¿?). No habló de "niña adoptada", aunque me dio un montón de explicaciones. "Mami, es como Alejandra (una compañera suya, igualmente adoptada) que solo tiene madre y que también la han traído de un sitio. Pero la niña no es suya porque su mama está adoptada” y minutos mas tarde me lo vuelve a explicar y me dice que el papá está adoptado :))). Menudo lío tiene en la cabeza con la niña. Y también menuda ilusión. Le recortó a su teacher una medalla de campeona y le hizo un dibujo a la pequeña adoptada. Como adultos puede que pensásemos: qué necesidad hay de dar tantas explicaciones a los niños? Liarles con los detalles. Sobre si es de fuera, que si tiene padre o si es especial... Pero luego al pensarlo mejor: Sí, que hay necesidad! Es la forma que tienen estas madres de construir una normalidad para sus hijos e hijas adoptadas o especiales. En las cabecitas de estos enanos se van a quedar asentadas y aceptadas otras realidades con total normalidad. Con cariño. Para prevenir rechazos futuros, prejuicios o estrecheces mentales. No es mejor poner esto en sus mentes que ideas sobre el pecado, el castigo, el rechazo a lo diferente? Desde luego que sí, y al igual que mi hijo, de mi parte, una medalla de campeona a la teacher!!