De piedras

       Cuando voy en bicicleta me obsesiono con las piedras. Las tengo miedo. Las veo de lejos, (...solo miro las piedras) y trato de alejarme todo lo posible. Curiosamente …cuanto más quiero evitarlas, más directa voy hacia ellas. Es como una fuerza de rechazo-atracción, que me juega malas pasadas. Me acerco, me acerco, freno con todas mis fuerzas y paso casi a paso de caracol por encima. Tanto, que la inercia no vence la fuerza de la piedra, y me caigo. Mis rodillas pueden dar buena fe de ello, tengo marcas no tan antiguas y que ya no quedan tan bien en las rodillas.

       De modo, que un día tras 20 kilómetros, ya mareada y cansada de luchar contra las piedras del camino, he decidido ir directa contra ellas. Pasar por encima. De frente. Y oye, que buena filosofía y que descanso! Así que, Nubecito, no tengas miedo a las piedras del camino! Hay que ignorarlas y si salen, pues ve de frente! Veo mentalmente a Nubecito que coge, va de frente y se estrella contra un piedraco, una roca. Bueno, Nubecito, de acuerdo…depende de la piedra. Si es grande no vas de frente, la intentas evitar. Hay piedras que se pueden pisar, otras que se tienen que evitar, otras que se tiene que parrar, analizar... Y como sabes cuál es cuál? Pues con el tiempo sabrás con que piedras te puedes medir…Vaya consejo le estoy dando! Esto es como cuando tu abuela te daba una receta y te decía: harina…lo que de de si, sal a ojo, azúcar a gusto…etc. Y ante tu protesta te decía: tu ve probando, lo aprenderás con la experiencia. Y cuando tienes experiencia, los consejos no te sirven de nada…ya te has dado contra suficientes piedras, como para no necesitarlos. Estoy dispuesta a hacer un análisis de la velocidad media de un ciclista y un árbol de decisiones en función del diámetro, volumen y peso de cada piedra, ajustado con el impacto de las condiciones climatológicas, fuerzas de fricción, etc. para dejarle a Nubecito un buen manual.  Pero…“los consejos condicionan”, así que: Nubecito…confío que sabrás encontrar la velocidad adecuada para enfrentarte a las piedras de tu camino…Yo estaré a tu lado siempre que me necesites.